El creativo de la saga explica los motivos de un cambio tan drástico de enfoque.Ken Levine
Cuando se anunció
Bioshock Infinite hace sólo unas semanas, todo el planeta gamer quedó asombrado por el
ingenioso cambio de registro que las series iban a experimentar con este
nuevo título. Recientemente hemos tenido oportunidad de
entrevistarnos con Ken Levine, el cerebro detrás de la franquicia, y hemos charlado precisamente sobre este extremo.
"Para nosotros el éxito del primer Bioshock residía en que, cuando
los usuarios lo veían, les venía a la mente la expresión "What the fuck?
(¿Qué coj***s?)". Se preguntaban por qué estaban allí, qué era ese
lugar...", declaró Levine a 3DJuegos. "No lo entendían. Era extraño y
sorprendente, y queremos devolver a la franquicia otra vez a esa
dinámica, a un lugar que los jugadores no conocen para que sientan lo
mismo que cuando llegaron por primera vez a Rapture y no entendían nada,
pero les parecía extraordinario y necesitaban averiguar más cosas sobre
él".
"Eso es lo que deseamos recuperar, y esa es nuestra misión en este
juego: hacer que las personas que creían que habían entendido Bioshock
regresen y se den cuenta de que no sabían todo sobre Bioshock", sostiene
el creativo. "El misterio ha vuelto, y dentro de un puzle que involucra
a una nueva ciudad directamente relacionada con la historia de
Bioshock. Pero es algo que deberéis descubrir por vosotros mismos."